8 sencillos pasos para reparar la puerta de tu nevera y ahorrar dinero en reparaciones costosas




Cómo reparar la puerta de una nevera


Introducción

La puerta de una nevera es una de las piezas más importantes del electrodoméstico, ya que permite mantener los alimentos frescos y evitar su deterioro. Sin embargo, el uso diario puede hacer que la puerta se desgaste, se desajuste o incluso se rompa. En este artículo, te vamos a enseñar cómo reparar la puerta de una nevera de forma sencilla y económica.

Causas más comunes del deterioro de la puerta de la nevera

Fricción en las bisagras

Uno de los problemas más frecuentes es la fricción en las bisagras de la puerta. La puerta puede empezar a chirriar o no cerrar correctamente debido al desgaste que se produce con el uso diario.

Sujeción de la puerta

Otro problema puede ser la sujeción de la puerta. Si la puerta no está debidamente sujeta, puede empezar a oscilar o incluso a abrirse por sí sola.

Rotura de las piezas

En algunos casos, la puerta de la nevera puede sufrir una rotura en alguna de sus piezas, como el mango o la bisagra.

Cómo reparar la puerta de la nevera

  1. Identifica el problema: lo primero que debes hacer es identificar cuál es el problema con la puerta de la nevera.
  2. Obtén las piezas necesarias: dependiendo del problema, puede que necesites adquirir algunas piezas para la reparación. Consulta con el fabricante o busca en tiendas especializadas en reparación de electrodomésticos.
  3. Ajusta las bisagras: si la fricción en las bisagras es el problema, ajusta las bisagras con una llave inglesa o un destornillador para que la puerta se abra y cierre con facilidad.
  4. Cambia las bisagras: si las bisagras están muy desgastadas, es posible que necesites cambiarlas por unas nuevas.
  5. Reemplaza el mango: en caso de rotura del mango, retira los tornillos que lo sujetan y sustitúyelo por uno nuevo.
  6. Revisa la sujeción: si la puerta no se sujeta correctamente, puede ser necesario ajustar la goma de la puerta o cambiarla por una nueva.
  7. Cambia la bisagra superior: si la puerta sigue sin cerrar correctamente, puede que la bisagra superior se haya desajustado. Ajusta o cambia la bisagra superior según sea necesario.

Conclusión

Reparar la puerta de una nevera no es difícil y puede ahorrarte el gasto de tener que comprar una nueva. Si sigues estos sencillos pasos, podrás hacerlo tú mismo y de forma económica. Recuerda que es importante mantener la puerta en buen estado para garantizar que tus alimentos se mantengan frescos durante más tiempo.

Tabla de piezas para la reparación de la puerta de la nevera
Pieza Coste
Bisagras nuevas 40€
Mango nuevo 15€
Goma de la puerta 25€
Bisagra superior 30€


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